Siempre vas a escuchar excusas de las personas que no quieren empezar con una nueva actividad, «es difícil», «es complicado», «no se me da», y otra de las excusas más comunes, “estoy muy viejo para aprender inglés”. Hay varias cosas que aclarar antes de ver si este mito es cierto o falso.
¿Qué quieres alcanzar con el inglés?
Si buscas aprender a comunicarte, que te entiendan y entender a los demás, no hay inconvenientes con la edad.
¿Quieres hablar como un nativo?
Acá es donde la mayoría de la gente pone todas sus fichas a la hora de apostar que el adulto no tiene ventajas. El cliché más convincente para muchos ha sido “Estoy muy viej@ para aprender otro idioma». Y aunque pudiera sonar 100% lógico, existen tanto ventajas como desventajas a la hora de empezar a aprender un idioma tardíamente en la vida.
Primero, veamos las desventajas:
Un niño, por ejemplo, puede dedicarle todo su tiempo a cualquier actividad ya que no tiene tantos compromisos (trabajo, sociales, etc.) como un adulto. Un niño puede desarrollar su memoria muscular porque esta se encuentra en pleno desarrollo, y en cuestiones de aprendizaje de idiomas puede llegar a hablar y sonar como un nativo. Recordemos que la lengua es un músculo y mientras más tiempo pases practicando los sonidos mejor los vas a producir. Obviamente, esta práctica de pronunciación debe estar guiada; nadie se vuelve el mejor basquetbolista de todos los tiempos tomando un balón y practicando sin saber las reglas del juego. Practicar da resultados si hay un fin en cada práctica.
Ventajas:
Un adulto tiene mucha mayor capacidad de razonamiento que un niño cuando se trata de entender los conceptos y estructuras gramaticales. El adulto también busca patrones de pronunciación y escritura de una forma distinta, quizás más madura, y puede llegar a entender mejor los mismos conceptos gramaticales, patrones de pronunciación y escritura más rápidamente que cualquier niño.
Entonces, puedes aprender inglés, o cualquier otra disciplina, a cualquier edad, y ni siquiera necesitarías saber leer pues un niño que todavía no lee aprende inglés fácilmente y en menor tiempo, afianzando su aprendizaje mientras crece.
En conclusión, no hay excusa que valga; el mejor momento para empezar a aprender algo nuevo es hoy; si quieres que te guiemos en este camino contáctanos, tenemos años de experiencia enseñando inglés a niños y a adultos.